Nuestros pasos en la elaboración se realizan mediante un proceso que se realiza de manera completamente tradicional.
Es un proceso totalmente artesanal para el cual sólo se utiliza carne de vacuno y sal, sin aditivos ni conservantes artificiales, garantizando así un alto nivel de grasa infiltrada que asegura su jugosidad.
Para su curación, realizada de forma tradicional, es salado, secado y posteriormente ahumado con leña de roble y/o encina. Este proceso de curación se realiza de forma más lenta debido a la alta calidad de la pierna de vacuno, sin forzar la maduración con la sal y ciñéndose siempre a técnicas artesanales con el fin de obtener un producto con los mejores estándares de calidad.
El resultado se diferencia por la dedicación de nuestro maestro cecinero, quien al final del proceso elije manualmente cada pieza, en su punto óptimo, para su salida a la venta.
En efecto, dos piezas del mismo peso, y elaboradas a la vez, pueden tener tiempos de curación muy opuestos, por su grasa externa, morfología, infiltración, raza de animal, color y dureza de la grasa. Debido a la heterogeneidad que tiene trabajar con materias primas de primera conseguimos que cada pieza de cecina o loncheado sea completamente diferente a otro.
PERFILADO
SALADO
Tiene por finalidad la incorporación de sal marina, apilada de forma tradicional, a la masa muscular de la carne favoreciendo la deshidratación de las piezas y su perfecta conservación.